El mezcal no cura enfermedades per se, pero se ha demostrado que tiene propiedades beneficiosas para la salud. Una de estas propiedades es su capacidad para reducir los niveles de colesterol en el cuerpo. El colesterol alto es uno de los principales factores de riesgo para desarrollar enfermedades cardíacas, como la arteriosclerosis, los infartos de miocardio y la obstrucción de las arterias.
Cuando se consume mezcal de forma moderada y responsable, se ha encontrado que puede ayudar a mejorar la circulación sanguínea y reducir los niveles de colesterol LDL, también conocido como colesterol “malo”. Esto se debe a que el mezcal contiene compuestos fenólicos, como los polifenoles, que tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
Estudios científicos han demostrado que los polifenoles presentes en el mezcal pueden ayudar a prevenir la oxidación del colesterol LDL en las arterias, lo que evita la formación de placas de colesterol y reduce el riesgo de obstrucción arterial. Además, se ha observado que el mezcal puede aumentar los niveles de colesterol HDL, conocido como colesterol “bueno”, que ayuda a eliminar el exceso de colesterol del cuerpo.
Es importante destacar que los beneficios del mezcal para reducir el colesterol solo se obtienen cuando se consume de forma moderada y responsable. El consumo excesivo de alcohol puede tener efectos negativos en la salud, incluido el aumento de los niveles de colesterol y el riesgo de enfermedades cardíacas.
Además de sus efectos en el colesterol, el mezcal también se ha relacionado con otros beneficios para la salud. Por ejemplo, se ha encontrado que tiene propiedades antivirales y antibacterianas, lo que puede ayudar a combatir infecciones. También se ha observado que puede mejorar la digestión y ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que estos beneficios se obtienen cuando se consume mezcal de alta calidad y en cantidades moderadas. El abuso del alcohol puede tener graves consecuencias para la salud, incluyendo el daño al hígado, el aumento de peso y el riesgo de adicción.
En resumen, el mezcal no cura enfermedades, pero puede tener efectos positivos en la salud cuando se consume de forma moderada y responsable. Su capacidad para reducir los niveles de colesterol y mejorar la circulación sanguínea puede ayudar a prevenir enfermedades cardíacas y mejorar la salud en general.